HORROR EN EL ORFANATO

HORROR EN EL ORFANATO

Era un día soleado, hermoso con el cielo celeste.
Iba rumbo al orfanato en el que me dejó mi abuelo ya sin poder cuidarme.

Al llegar y bajar del auto me topé con un jardín inmenso y lleno de flores, la vista y el olor era exquisito.

De inmediato se acercó ami la mamá de la casa, aquella señora a la cual se ocupa de todos los niños, se encarga de que coman, vistan, estudien y sean felices.
__ Hola, mi nombre es Ursula, pero puedes decirme "mamá, claro que me gusta mucho más (sonrió y me acarició la cara). Me sentí feliz y en casa.
De inmediato tomó mi valija y me ayudó a llevarla hasta dentro de la casa.

_Vamos que es hora de almorzar y todos los niños están en el gran comedor.
Llegamos y me presento delante de todos, lo único que oía eran murmullos, y claro era la chica nueva.

Me quedé parada viendo a todos, por suerte y de inmediato me llamó la cocinera.
¡Holaa, pero que bonita eres! Ven siéntate aquí, yo soy la cocinera, me llamo Lorena, pero puedes decirme "Lolo" (me dijo casi gritando con mucha alegría).
Me sentía extraña, en la mesa no conocía a nadie, tenía vergüenza y casi no toque la comida.
Pasaron unos minutos y comencé a sentirme mal, así que decidí ir al baño.

Al parecer creo que me perdí, y comencé a caminar por los pasillos hasta que entre en una habitación, creí que era el baño.

Al entrar y abrir la puerta de golpe veo a un señor gordo y fumando, parado frente a una chica gritándole. (Parecía una oficina o algo así)
Lo único que hice fue decir
_lo siento, creí que era el baño, ya.. me voy.

(cerraba la puerta con la mirada hacia abajo)

_¡ohh, no te preocupes, debes ser la nueva integrante de nuestro adorado hogar! _exclamó con el cigarrillo en la mano y la otra en mi hombro.

Yo estaba muy avergonzada, ¿había interrumpido al director del establecimiento? No lo sabía.

_bueno, será mejor que vuelvas a tu cuarto Melina, y no quiero volver a castigarte, ¡vamos! Que ya no eres una niña, da el ejemplo a los pequeños, y regalame una sonrisa.
(le dijo el gordo y viejo señor con un tono intimidante).

Ambas salimos de la oficina y quise preguntarle que le había dicho, tan curiosa como siempre me acerqué y le pregunté en voz baja...
_¿qué fué lo que te dijo? (Yo estaba atenta mirándola)
_¿ácaso ves que tengo ganas de socializar? (me preguntó sarcásticamente)
mientras se bajó la manga de su campera rápidamente.

Fué un instante, pero fué suficiente para que pueda ver las marcas de cigarrillos en su brazo.
¡¡¡le ví quemaduras!!!, en ese entonces Sólo quería contarle a la mamá de la casa, ese señor había lastimado a Melina, y aunque me trato mal no podría quedarme sin contarle a nadie.

Busqué a mamá por toda la casa hasta que le pregunté a un jovencito que estaba pasando por ahí.

_ disculpa, sabes dónde está mamá?
El niño me miró y respondió.
_alguien adoptó a Lía, así que la llevó con sus papás nuevos, no tarda en volver.

Pasaron unas horas y vuelve mamá al hogar.

Corrí de inmediato a contarle, (ella me sonrió) y dijo...
_melina es una chica con muchos problemas y aveces el Sr.Grood opta por hablar severamente con ella, pero no debes de preocuparte, se que no lastimaría a mis niños.

Se alejó dejándome hablando sola.

Era hora de ir a dormir y no encontraba mi habitación, maldita sea el lugar era enorme.

Caminaba por los pasillos hasta que llegue a mi habitación.
Al acostarme e intentar dormir escucho un auto llegar.
(me asomo por la ventana) y lo que veo es a 2 gordos gigantes obesos con una jaula cada uno.

Me asusté, su apariencia era asquerosa casi parecían moustros.

No sabía que hacer pero los vi meterce a la casa.
Lo primero que se me ocurrió fue despertar a una de las chicas para que me acompañara a ver quienes eran y que querían.
Le conté a René lo que había visto, claro que no me creyó.

Estábamos en el pasillo y vimos a esos hombres obesos meterce al despacho de mamá.
Asustadas por lo que le podían hacer corrimos y casi al abrir la puerta escuchamos...
_ espero que esta vez sí sea de buena calidad, no quiero decepcionarme otra vez.
Pronto se escuchó a mamá responder...
_claro que no, mi señor. Esta si es calidad.
René y yo nos miramos, no sabíamos de que hablaban.

Hasta que se saludaron y pronto corrimos a la habitación.
_Vamos a ver por la ventana, me dijo René.

Al asomarnos vimos como en sus jaulas tapada con una manta se llevaron algo que se movía.
Nos quedamos inmóviles y de inmediato nos pusimos tristes, pues mamá les había vendido algún animal de nuestra granja.

Al día siguiente René y yo sin desayunar corrimos desesperadas a ver que animal faltaba y para nuestra sorpresa no faltaba ninguno.

(De pronto nos llamó mamá)
Nos dijo que dejáramos de jugar con los animales y que vayamos a desayunar que tenía que dar un comunicado.

_Atención mis niños Porfavor, les quiero comentar que Susy y Marcos han sido adoptados y hoy los he llevado con sus padres, no han tenido el placer de despedirse de ustedes, pues porque sus papás vinieron muy temprano a llevárselos, pero les he pedido que vuelvan a visitarnos.
Espero que estén felices por ellos, eso es todo y disfruten del día.

René y yo sabíamos que se trataba de aquellos Seres despreciables.
Lo que no teníamos en claro era que hacían con los niños al llevárselos.

Pronto se acabaría la duda, pues esa noche Le propuse a René investigar entrando al despacho de mamá.

Eran las 2:00 am y René y yo emprendimos nuestra búsqueda de información.

Entramos al despacho de mamá y comenzamos a revisar todo. Luego de un rato veo a René con una carpeta en la mano, (se quedó inmóvil)
Le quite la carpeta de la mano y lo que vi fue aterrador.
Eran fotos de todos los niños del orfanato, estaban sus fotos, pesos Kg, color de piel, lo que comían, y lo que futuramente serían.
Rápidamente busque a Marcos y a susy, debajo de la foto de Marcos decía.. (Albóndigas con espagueti)
Bajo la foto de Susy decía.. ( Asado con verduras).
Mi cuerpo se aflojó y un escalofrío se apoderó de mi.
Me caí al suelo y René me levanto.
_tenemos que salir de aquí antes de que nos vean.

Volvíamos a la habitación y en la puerta estaba mamá esperándonos.
_¿Qué tal mis niñas? No puedo dejar que alarmen a mis niños con sus chismes acerca de lo que han visto.
(Chasqueó los dedos) y aparecieron dos hombres con traje, nos arrastraron de los pelos y nos metieron en jaulas.

Estábamos dentro de las jaulas que habíamos visto a los cerdos traer.
René no paraba de llorar, yo intente tranquilazarla, fue inútil.
Al cabo de unos minutos apareció mamá, (entró en su despacho y comenzó a hablar por teléfono).

_si, aquí las tengo mi señor.
...
_claro, tengo sus registros.
...
_si señor, en muy buen estado ambas.
...
_ las tengo en mi despacho. si señor, los espero.

Pasaron unos minutos y aparecieron los cerdos enormes, sus caras horribles y cuerpos asquerosos.
Le dieron el dinero a mamá y nos arrastraban por el jardín.

No dejábamos de gritar, pero al parecer nadie nos escuchaba.

Salimos por la puerta y nos sacaron de las jaulas, estábamos como en un callejón.
Uno de los cerdos tomó a René y se sentó ensima arrancandole los brazos.
De pronto veo que el otro cerdo se me acerca amarra mi cabeza con un soga.
Cierro un instante los ojos y me veo colgada de una jaula enorme, comenzó a faltartarme el aire, yo intentaba safarme cuando veo un cuchillo enorme atravesar mi estómago.

Eso acabó con mi vida.

Desde entonces deambulo por el orfanato intentando advertirle a los otros niños.
Pero desgraciadamente ninguno de los que estamos de este lado, somos escuchados o vistos por los niños que aún tienen vida.