En la hacienda de otumba un día nos tocó acampar

En la hacienda de otumba un día nos tocó acampar

En la hacienda de otumba un día nos tocó acampar. Yo conocía esa hacienda desde niño y siempre me pareció un lugar muy bonito y esa hacienda era tipo la película de "el espinazo del diablo", pintada de color rojo y con grandes puertas. 

Cuando pude estar dentro aprox. a los 22 años acampando, me pareció un lugar hermoso, una iglesia adentro, caballeriza y varias casas de madera donde obvio, nadie vive.

La Segunda noche que pasamos ahí, admiramos las estrellas, la luna y la Tranquilidad de la noche. Pero en segundos, dentro de toda esa tranquilidad se escucho una mujer que gritaba y lloraba, rezaba y pedía a Dios su ayuda. 

Estábamos solos eramos 10 personas y todos estábamos platicando, no había alcohol, solo café y té, y de verdad, nunca había escuchado un grito tan desesperado. Fuimos a asomarnos a la iglesia y había varias velas prendidas, pero nuestra sorpresa fue que no había nadie.

Al otro día cuando nos fuimos nos dijeron que ahí nunca mataron a nadie, pero en la iglesia se iban a refugiar por los males augurios y cuentan que en ocasiones la gente escucha lamentos desgarradores en su interior.