Bueno ahí les va otra pequeña historia

Bueno ahí les va otra pequeña historia

Bueno ahí les va otra pequeña historia, cuando mi padre falleció por supuesto lo enterramos en estos lugares se acostumbra hacer el novenario se les reza a los difuntos durante 9 días, bueno resulta que como al tercer día llegó una señora (vecina de la familia) no recuerdo el nombre estaba sentada a un costado de los cuatro cirios que estaban encendidos, cabe mencionar que por estos lugares se acostumbra usar saumerio para auyentar las malas vibras bueno resulta que la vecina pues la comenzamos a ver qué su rostro comenzó a cambiar se puso un poco pálida después su cara se puso como morada no podía hablar, pensamos que era por el humo del saumerio le ayudamos a salir de la casa ya en el patio le echamos aire con un cartón en su rostro para que recuperará el aliento le dimos a oler un poco de alcohol le dimos agua y la señora decidió irse a su casa con su hijo que la acompañaba, los siguientes días de rezo no llego y mi madre la fue a visitar para saber cómo estaba, la sorpresa fue que ella le confesó que no iría más a los rezos de mi padre ya que ella había visto claramente a mi padre acostado entre los cuatro cirios siendo que ya hacía días lo habíamos enterrado, espero les guste esta pequeña anécdota de la muerte de mi viejo seguiremos compartiendo más historias dulces sueños